
Hay animales que son simplemente fantásticos, y que destacan por su belleza
natural. Tal es el caso de los leones blancos, unos felinos que parecen sacados
de cuentos de hadas. Se trata de una subespecie que está en peligro de
extinción, por lo que existen pocos ejemplares alrededor del mundo. En el Blog de Sergio Kou hemos preparado un
artículo donde conocerás las principales
características que tienen los leones blancos, además del impacto que han
tenido en la cultura popular.

El secreto que esconde el pelaje de los leones blancos
No muchas personas conocen la verdad
sobre los leones blancos y su color. Esta peculiar característica se debe a
una cuestión genética, y les confiere un aspecto único y llamativo.
Básicamente, vendrían a ser los mismos leones sudafricanos, pero que debido a
una mutación muy extraña terminan obteniendo un pelaje de color blanco. Sin
embargo, no hay que confundir esta condición con el albinismo, en donde la
ausencia de pigmentación también se encuentra en los ojos.

El caso de los leones blancos es muy distinto, puesto que otras partes de
su cuerpo sí tienen un color natural. Incluso, sus ojos pueden llegar a tener
una tonalidad dorada, aunque también se han registrado ejemplares con ojos
azules y verdes. Esto ha motivado a su cría selectiva, con el objetivo de
convertirlos en atracciones de zoológicos y circos. Sin embargo, los riesgos de
esta práctica son evidentes. Cuando los lazos consanguíneos se hacen más
cercanos, es posible que aparezcan diferentes problemas físicos.

La verdadera historia de los leones blancos y su color
Aunque el pelaje blanco de estos felinos destaca por su belleza, también
conlleva ciertas limitaciones y obstáculos en su supervivencia. A diferencia de
los leones comunes, que pueden camuflarse con facilidad debido a su color, los
leones blancos son incapaces de hacer esto. De este modo, encuentran
dificultades para alimentarse, impidiendo que vivan en estado salvaje. Debido a
esto, es más común verlos en reservas naturales y zoológicos, donde no tienen
que preocuparse por cazar y tienen una vida tranquila.

¿Cuándo aparecieron por primera vez los leones blancos?
Los primeros avistamientos ocurrieron en la región de Timbavati, ubicada en
África del Sur. Aquí ya se contaban leyendas sobre estos fantásticos animales,
que formaban parte de la tradición oral de varias tribus locales. Eran vistos
como animales sagrados, e incluso se decía que cruzarse con ellos era una señal
de buena suerte. No fue hasta 1970 que fueron reconocidos a nivel mundial, y
hoy en día se crían ejemplares en diferentes países. Además, los leones blancos han servido de
inspiración para series y películas. El mejor ejemplo de esto es la serie
de animación “Kimba, el león blanco”, que fue imprescindible para una de las
creaciones más famosas de Disney, “El rey león”.